martes, 7 de diciembre de 2010

La (¿)Republica (?) Chilena 1

El discurso político está centrado en buscar el mejoramiento de la democracia chilena. La búsqueda por una mejor participación ciudadana y una real fuerza de la sociedad civil al momento de realizar políticas públicas.

Sin embargo y sin desmerecer la búsqueda por mejor democracia, en la discusión política no hemos preocupado de velar por la calidad republicana de nuestro gobierno, de nuestro estado.
La república consiste en su versión más clásica en la separación de los poderes del Estado, donde exista un accontability horizontal entre las instituciones. Sin embargo también debemos entender una república robusta, como aquella donde también existe una separación entre el Estado/gobierno y los poderes facticos o Sociales, es decir un estado separado del poder de la iglesia, del poder económico o del poder sindical.

Tras estas dos dimensiones de un sistema republicano, podemos preguntarnos, si Chile pasaría el test de la Blancura republicana

Respecto a la primera dimensión, respecto a la separación de los poderes tradicionales, dentro del Estado, uno pensaría que Chile se encuentra en un nivel más que aceptable, dado la clara división de poderes y que cada uno respeta al otro, dado que no se muestra luchas por supremacía, como en el caso de Honduras.

Bueno. la verdad es que Chile, está lejos de un nivel más que aceptable. Esto, por las capacidades extraordinarias que presenta el poder ejecutivo. Por un lado y si comparamos las relaciones entre el ejecutivo y el legislativo, encontramos que el gobierno es c-legislador y que el congreso es meramente un buzón de la Moneda. Las atribuciones del palacio de gobierno es tal que Chile es considerado unos de los país latinoamericano más presidencialista, donde este tiene la capacidad de hacer que es lo que se legisla y que no.
Frente al poder judicial encontramos que es el presidente quien puede revocar condenas con los indultos, sin la necesidad de estar de acuerdo con alguno de los otros poderes, lo que significa en la práctica que el ultimo en decidir quién es culpable o no, es el poder ejecutivo

Con esto podemos ya dudar de la calidad republicana de Chile y nos hace pensar en diferentes reformas posibles para lograr una mejor calidad republicana.

Respecto a los poderes factico es espacio para otra columna, pero el hecho de imaginar una virgen en La Junji, nos da una Idea de que tanto estamos separados de esos poderes.

viernes, 3 de diciembre de 2010

Repensando la Meritocracia

Cuando se habla de meritocracia pareciera que nadie le hace asco, que todos la queremos y la amamos. Pero que hay detrás de esta palabra.
A nivel personal creo en al meritocracia, por todo lo que conlleva y aun más por el razonamiento liberal que trae consigo.

Creo que la meritocracia como concepto sirve para entender cuando una desigualdad es legítima o no. Se las desigualada que se vive es producto de un estado inicial a la persona, de la cual no puede moverse, estamos frente a desigualdades ilegitimas, en cambio si la desigualdad es producto de los resultados de el talento o merito de una persona, esa desigualada no debiese porque ser suprimida o visto como una afrenta hacia lo sociedad.

Las desigualdades en una sociedad, donde prima la meritocracia, es totalmente legitima y hasta deseable en el sentido de que viendo las diferencia y teniendo las oportunidades, las personas trabajar para aumentar su sensación de bienestar y el de sus familias.
Pero, ¿Que es una sociedad meritócrata? Una sociedad meritocrática es una comunidad donde encontramos presente los principios de igualdad inicial y la igualdad ante la ley, que también son la manera de legitimar las desigualdades sociales. Estos principios, permiten el desarrollo del hombre y no lo atan a ninguna red superior que coarte su iniciativa y su decisiones.
Por lo mismo una sociedad meritocrática, es aquella donde se disfruta entre todos los ciudadanos una IGUAL LIBERTAD

¿Podemos forzar la Igualdad? ¿Qué tan justo es que todos seamos iguales?
La igualdad es una Utopía, casi una pesadilla, si se considera, como la igualdad de propiedad física o mental, dado que no apoya el hecho de que cada persona tiene distintas necesidades y por otro lado, la idea de que esta igualdad asume la capacidad de saber qué es lo que necesita cada persona, porque esta Igualdad no es intrínseca al ser humano, entonces debería existir un ser que pueda hacer dicha repartición.

El forzar la libertad coarta la libre expresión del hombre, en el sentido de que no puede anhelar más de lo que le corresponde, lo cual está fijado por alguien externo a él.
¿No sería mejor acaso, que cada cual forjara sus propias necesidades dado sus propios merito?

El forzar una igualdad para todos atenta contra el principio meritócrata dado que la posesión de bienes (no solo materiales), no está dado según el esfuerzo personal.

Ahora bien, en esta sociedad meritócrata debe existir una igualdad de oportunidades y en ese sentido, la sociedad tiene un rol, en cuanto debe dar al individuo un piso mínimo para poder desarrollarse, debe existir una cancha pareja para todos, donde da lo mismo de donde vengas, si pegas una patada por detrás, la tarjeta es roja.

La meritocracia no es solo que gane el m{as mejor en una cancha pareja, la meritocracia es asumir las desigualdades como algo propio en los seres humanos y entender que lo justo es que la sociedad existan esas diferencias, porque cada individuo es diferente al resto.